El 17 de noviembre de 2024, el ministro australiano de Defensa, Richard Marles, recibió al secretario de Defensa de EE. UU., Lloyd Austin, y al ministro de Defensa japonés, Gen Nakatani, en Darwin para una reunión trilateral, marcando el primer encuentro de este tipo en Australia. Los líderes se comprometieron a mejorar la cooperación en seguridad mediante el establecimiento de consultas de defensa trilaterales y ejercicios militares anfibios conjuntos.
Marles enfatizó el papel crítico de la asociación trilateral para la estabilidad regional, afirmando: "Continuamos aumentando nuestra cooperación en inteligencia y vigilancia en la región del Indo-Pacífico como prioridad." Nakatani destacó la importancia del organismo consultivo, expresando el deseo de actualizar el marco de cooperación en defensa entre Japón, EE. UU. y Australia.
Bajo el nuevo acuerdo, la Brigada Anfibia de Desplazamiento Rápido de Japón, una unidad marítima de élite, será enviada a Darwin para entrenar junto a las fuerzas australianas y estadounidenses. Marles describió esto como una declaración significativa del compromiso de las tres naciones de trabajar juntas. Recientemente, Australia anunció la compra de misiles por más de 4 mil millones de dólares a EE. UU.
Austin señaló que la alianza aumentará las "actividades de vigilancia y reconocimiento" entre los tres países, lo que apoyará sus objetivos para una región Asia-Pacífico segura y pacífica. Expresó orgullo por el trabajo del Pentágono para fortalecer las alianzas en la región y colaborar con naciones que comparten una visión de un Indo-Pacífico libre y abierto.
China continúa teniendo disputas territoriales y marítimas con varios países del sudeste asiático, especialmente sobre el Mar de la China Meridional. Un comunicado conjunto reiteró su firme oposición a cualquier intento unilateral de cambiar el statu quo mediante la fuerza o la coerción. Marles también se refirió a India, que es parte del Quad junto con EE. UU., Japón y Australia, anunciando que las cuatro naciones están trabajando más estrechamente que nunca, incluidos planes para ejercicios conjuntos de guardacostas anunciados en septiembre.
Australia ha estado fortaleciendo sus vínculos con EE. UU. para contrarrestar la influencia de China. Además de desarrollar su flota naval, Australia planea adquirir submarinos de propulsión nuclear bajo el pacto de seguridad trilateral AUKUS con EE. UU. y el Reino Unido. A pesar de las incertidumbres sobre el futuro del acuerdo tras la elección de Donald Trump en EE. UU., los funcionarios australianos expresaron confianza en que el pacto se mantendrá.