Una reciente encuesta de la Marquette Law School indica que el 45 % de los adultos estadounidenses aprueban el desempeño de los jueces de la Corte Suprema, marcando un ligero aumento desde los niveles anteriores. La tasa de aprobación aumentó en dos puntos desde julio, mientras que una encuesta de Gallup reporta que el 48 % del público expresa un nivel significativo de confianza en la rama judicial.
Este aumento en la aprobación se produce mientras los demócratas buscan convertir la Corte Suprema en un tema clave en las próximas elecciones, abogando por reformas como un código de ética vinculante y límites de mandato para los jueces. El partido ha intensificado su crítica hacia la corte tras la decisión de 2022 que anuló Roe v. Wade.
En respuesta a los datos de la encuesta, Carrie Severino, presidenta de la Judicial Crisis Network y ex secretaria del juez Clarence Thomas, afirmó que los hallazgos desafían la narrativa predominante de desconfianza pública hacia la Corte Suprema.
La encuesta de Gallup clasificó a la rama judicial como la cuarta institución más confiable entre diez entidades civiles y políticas, en contraste con el gobierno federal y la rama legislativa, que se ubicaron en el octavo y noveno lugar, respectivamente, en términos de desconfianza pública.
Tras la decisión de la corte en el caso Dobbs v. Jackson Women's Health Organization, que devolvió la cuestión de los límites al aborto a los estados, la aprobación pública de la Corte Suprema había caído a niveles históricamente bajos, con solo el 38 % de aprobación registrada entre julio y diciembre de 2022.
La encuesta de Marquette también reveló que el 90 % de los encuestados apoya la implementación de un código de ética estricto para los jueces. Sin embargo, las opiniones sobre los estándares éticos de los jueces están divididas; el 27 % califica sus estándares como muy altos o altos, mientras que el 35 % los considera bajos o muy bajos.
A medida que la carrera electoral se estrecha entre el expresidente Trump y la vicepresidenta Kamala Harris, la posibilidad de nombrar a un nuevo juez de la Corte Suprema sigue siendo un tema crítico para ambos partidos, con el 83 % de los encuestados considerando que la selección del próximo juez es muy o algo importante.
En contraste, los votantes republicanos priorizan la estabilidad económica y la inmigración, con una reciente encuesta de Gallup que indica que estos temas ocupan un lugar destacado entre sus preocupaciones.