El Telescopio Espacial James Webb (JWST) ha revelado detalles sin precedentes del sistema estelar binario Wolf-Rayet 140 (WR 140), ubicado aproximadamente a 5.000 años luz de distancia. Las observaciones muestran 17 capas de polvo en expansión, formadas por la colisión de vientos estelares, proporcionando nuevas perspectivas sobre los procesos dinámicos en el espacio.
El estudio, publicado en The Astrophysical Journal Letters, destaca la rápida expansión de estas capas de polvo. Se mueven hacia afuera a casi el 1% de la velocidad de la luz, o más de 2.600 kilómetros por segundo. Esto desafía la escala de tiempo típica de los eventos cósmicos, demostrando que pueden ocurrir cambios significativos relativamente rápido. Este descubrimiento, de gran interés para la comunidad científica, abre nuevas puertas a la investigación espacial.
Dirigido por Emma Lieb de la Universidad de Denver, el equipo de investigación utilizó las capacidades de infrarrojo medio de Webb para detectar las capas de polvo frío. Estas capas, invisibles en otros espectros de luz, están compuestas de polvo rico en carbono. Los hallazgos sugieren que este polvo podría sobrevivir durante cientos de años, contribuyendo potencialmente al medio interestelar. Este tipo de hallazgos resuenan con el interés del público en general, especialmente en países como España y Argentina, donde la divulgación científica es cada vez más popular.
La investigación, que contó con la colaboración de NSF NOIRLab, ofrece nuevos datos sobre las tasas de expansión y la distribución de las capas de polvo. Esto proporciona información valiosa sobre los ciclos de vida de las estrellas masivas y su papel en el enriquecimiento del medio interestelar. Este estudio subraya la importancia del Telescopio Espacial James Webb para avanzar en nuestra comprensión de los fenómenos cósmicos y la necesidad de seguir invirtiendo en investigación espacial, un campo que siempre ha despertado la curiosidad y el asombro en la sociedad.