La Unión Europea ha iniciado oficialmente su proyecto de constelación de satélites Iris², firmando un contrato de concesión con un consorcio europeo para establecer un sistema de comunicación seguro basado en el espacio. Este ambicioso proyecto prevé una red multiorbital compuesta por casi 300 satélites, con el objetivo de competir con los principales proveedores de internet satelital de EE. UU. como Starlink y el Proyecto Kuiper de Amazon.
La vicepresidenta de la Comisión Europea, Henna Virkkunen, destacó que esta moderna constelación mejorará la protección de infraestructuras críticas, aumentará la conectividad en áreas remotas y fortalecerá la autonomía estratégica de Europa. Desarrollado como una asociación público-privada, Iris² servirá tanto a clientes gubernamentales como privados.
Con un presupuesto estimado de 10.6 mil millones de euros (11.1 mil millones de dólares), el sistema está diseñado para facilitar comunicaciones seguras con fines militares, de defensa y diplomáticos, al tiempo que aborda necesidades de vigilancia, conectividad en áreas afectadas por desastres naturales y acceso a internet comercial.
El lunes, la UE firmó una concesión de 12 años con SpaceRISE, un consorcio liderado por Eutelsat, Hispasat y SES. Otros socios incluyen OHB, Airbus Defence and Space, Telespazio, Deutsche Telekom, Orange y Hisdesat.
Andrius Kubilius, comisionado de la UE para defensa y espacio, describió la firma como un momento clave para lograr una Europa más fuerte, más conectada y más resiliente. Señaló que Iris² refleja el compromiso de la Unión de fortalecer la presencia de Europa en el espacio, asegurando seguridad y competitividad para gobiernos, empresas y ciudadanos.
Más de la mitad del presupuesto del proyecto será financiado por la UE, con 4.1 mil millones de euros provenientes de inversiones privadas y 550 millones de euros de la Agencia Espacial Europea (ESA). Este lanzamiento es oportuno, ya que el mercado de conectividad espacial de alta velocidad se vuelve cada vez más competitivo, especialmente para servir a regiones aisladas.
Mientras Starlink ha puesto en órbita más de 6,000 satélites y atiende a 2.6 millones de clientes, Iris² busca lograr un rendimiento comparable con un menor número de satélites gracias a su diseño multiorbital. La infraestructura terrestre de Iris² estará exclusivamente ubicada en Europa, con centros de control en Luxemburgo, Francia e Italia, y se espera que el sistema esté completamente operativo para 2030.
El programa Iris² no solo aborda las necesidades de conectividad actuales, sino que también sienta las bases para la autonomía estratégica de Europa en un mundo cada vez más digitalizado. Esta iniciativa marca el tercer gran proyecto espacial de la UE, después del sistema de navegación por satélite Galileo y la constelación de satélites de monitoreo de la Tierra Copernicus.