El lunes, Ofcom, el regulador de internet del Reino Unido, publicó sus primeras directrices finales para proveedores de servicios en línea bajo la Ley de Seguridad en Línea. Esto marca el inicio de los plazos de cumplimiento para una ley destinada a reducir los daños en línea, con el primer plazo establecido para el 16 de marzo de 2025.
Ofcom ha enfrentado presión para acelerar la implementación de este régimen de seguridad en línea, especialmente después del papel de las redes sociales en los disturbios de verano. Las nuevas directrices obligan a más de 100,000 empresas tecnológicas a nivel mundial a evaluar y mitigar los riesgos asociados con el contenido ilegal, incluido el terrorismo, el discurso de odio y la explotación infantil.
El incumplimiento podría resultar en multas de hasta el 10 % de los ingresos anuales globales de una empresa. La ley se aplica a todos los proveedores de servicios con vínculos al Reino Unido, independientemente de su ubicación, y exige que incluso las plataformas más pequeñas adopten diversas medidas de seguridad.
Las obligaciones clave incluyen sistemas de moderación de contenido para la eliminación rápida de contenido ilegal, mecanismos para que los usuarios presenten quejas y configuraciones de privacidad para menores. Notablemente, la ley introduce la responsabilidad penal potencial para los ejecutivos, enfatizando la rendición de cuentas en los niveles más altos.
La CEO de Ofcom, Melanie Dawes, destacó que se esperan cambios significativos en las operaciones tecnológicas para 2025, ya que las empresas deben ajustar sus algoritmos para evitar que aparezca contenido ilegal. Las futuras directrices se centrarán en mejorar las protecciones para los niños, incluidas las medidas de verificación de edad y restricciones sobre contenido dañino.
A medida que evoluciona el panorama digital, Ofcom planea adaptar sus directrices para abordar nuevos desafíos, como el auge de la inteligencia artificial generativa, asegurando que la seguridad en línea siga siendo una prioridad en un entorno cada vez más complejo.