Pakistán ha suspendido los servicios móviles e Internet en ciertas áreas de la capital, Islamabad, a medida que aumentan las tensiones antes de una protesta planificada por los partidarios del ex primer ministro encarcelado, Imran Khan. El gobierno anunció la suspensión en las redes sociales, aunque no especificó las áreas afectadas ni la duración del apagón.
La empresa de telecomunicaciones Nayatel ha ofrecido servicios de línea fija como alternativa para aquellos afectados por la suspensión del servicio móvil. Khan, a pesar de estar encarcelado durante más de un año y enfrentar numerosos cargos penales, sigue siendo una figura popular, y su partido, Pakistan Tehreek-e-Insaf (PTI), moviliza a los partidarios a través de redes sociales y plataformas de mensajería como WhatsApp.
En anticipación de la protesta, se han implementado estrictas medidas de seguridad, incluyendo el sellado de carreteras clave y el despliegue de fuerzas de seguridad. El gobierno ya ha restringido el acceso a plataformas de redes sociales y servicios VPN, limitando aún más las opciones de comunicación para los manifestantes. El portavoz del PTI, Sheikh Waqas Akram, ha indicado que la esposa de Khan, Bushra Bibi, lidera un convoy hacia Islamabad, enfatizando la determinación del partido para movilizar apoyo.
Las autoridades han advertido que cualquier intento de violar el perímetro de seguridad de la ciudad resultará en arrestos. Esta situación se agrava por la próxima visita del presidente bielorruso Alexander Lukashenko, con funcionarios afirmando que las protestas podrían interrumpir los compromisos diplomáticos. El Ministro del Interior ha afirmado que, aunque los servicios de datos móviles están afectados, los servicios de voz permanecen operativos.