El superordenador Frontier en Tennessee es ahora el ordenador más potente del mundo. Opera a 1,102 trillones de operaciones por segundo.
Desarrollado por Oak Ridge, HPE Cray y AMD, Frontier es el primer ordenador exaescala. Puede realizar tareas complejas a alta velocidad.
Estas tareas incluyen simulaciones científicas, análisis de datos a gran escala y desarrollo de sistemas de IA. Los superordenadores como Frontier permiten una predicción climática precisa y la simulación de enfermedades.
También ayudan en el descubrimiento de nuevos materiales y en el entrenamiento de sistemas de IA. Esto impacta en el mercado laboral, aumentando la demanda de profesionales capacitados en datos e IA.