Microsoft finalizará el soporte para Windows 10, sin nuevas actualizaciones de seguridad ni soporte técnico después de la fecha límite. Los usuarios de PCs incompatibles tienen varias opciones:
No hacer nada: Continuar con un sistema operativo no soportado presenta riesgos de seguridad.
Soluciones de terceros: Considere usar herramientas como 0patch para problemas de seguridad críticos.
Actualizar hardware: Reemplace las viejas PCs por nuevos modelos que soporten Windows 11.
PC virtual: Alquile un PC virtual con Windows 11 a través de Windows 365 con actualizaciones de seguridad extendidas.
Cambiar de sistema operativo: Transición a Linux o ChromeOS Flex, aunque la compatibilidad puede ser un problema.
Microsoft ofrecerá Actualizaciones de Seguridad Extendidas (ESUs) para Windows 10 a un costo. Las instituciones educativas pagan 1 $ por el primer año, aumentando a 4 $ en el tercer año. Los clientes comerciales enfrentan costos significativamente más altos, totalizando 427 $ durante tres años. Los consumidores pueden extender el soporte por 30 $ durante un año adicional.
Para aquellos que deseen actualizar a Windows 11 a pesar de las comprobaciones de compatibilidad, ediciones del registro y herramientas como Rufus pueden ayudar a eludir las restricciones.