En un movimiento audaz, Hanoi, la capital de Vietnam, se prepara para prohibir las motocicletas de gasolina en 2026. Esta decisión, impulsada por el Primer Ministro Pham Minh Chinh, busca abordar la creciente contaminación del aire y transformar la ciudad en un espacio más sostenible. Desde una perspectiva económica, esta transición presenta tanto desafíos como oportunidades.
El costo de la transición es significativo. Se estima que el gobierno vietnamita invertirá una suma considerable para subsidiar la conversión de aproximadamente 450,000 motocicletas de gasolina a modelos eléctricos. Según informes recientes, el programa de subsidios cubrirá casi todos los costos de conversión, incluyendo las tarifas de registro para las nuevas motocicletas eléctricas. Este gasto, aunque necesario, representa una inversión sustancial que impactará el presupuesto de la ciudad.
Sin embargo, la prohibición también ofrece beneficios económicos a largo plazo. La reducción de la contaminación del aire podría disminuir los costos de atención médica asociados con enfermedades respiratorias, lo que a su vez aliviaría la carga sobre el sistema de salud. Además, la transición a vehículos eléctricos podría estimular la innovación y el crecimiento en la industria de vehículos eléctricos, creando nuevos empleos y atrayendo inversiones extranjeras. El mercado de motocicletas eléctricas en Vietnam está en auge, con un aumento del 30% en las ventas en el último año, según datos de la Asociación de Fabricantes de Automóviles de Vietnam.
La implementación de zonas de bajas emisiones a partir de 2025 y la expansión del transporte público eléctrico son pasos cruciales para asegurar el éxito de esta iniciativa. Estos esfuerzos, junto con el programa de subsidios, demuestran el compromiso de Hanoi con un futuro más limpio y económicamente viable. En conclusión, la prohibición de motocicletas de gasolina en Hanoi es una apuesta estratégica con implicaciones económicas significativas, que busca equilibrar los costos iniciales con los beneficios a largo plazo para la salud pública y el crecimiento económico.