El mercado de vehículos eléctricos (VE) en EE. UU. está experimentando un crecimiento significativo, con 1,4 millones de nuevas inscripciones de coches eléctricos en 2023, un aumento del 40 % en comparación con el año anterior. Las ventas del primer trimestre de 2024 alcanzaron aproximadamente 350,000, marcando un aumento del 15 % interanual.
Sin embargo, persisten desafíos, especialmente en lo que respecta a la infraestructura de carga pública. Una encuesta indica que el 36 % de los propietarios potenciales de VE citan el tiempo de carga como una barrera, mientras que el 31 % mencionan la cantidad insuficiente de estaciones de carga.
La carga pública es esencial para quienes no tienen cargadores en casa, especialmente los residentes urbanos y los inquilinos de apartamentos. Una red de carga pública efectiva es crucial para permitir viajes más largos y proporcionar apoyo en emergencias.
Según el Índice HERE-SBD de VE 2024, estados como Delaware y Massachusetts destacan en preparación para VE gracias a inversiones significativas y políticas coordinadas. En contraste, estados como Alaska y Arkansas enfrentan desafíos geográficos y de inversión, lo que resulta en infraestructura limitada.
El programa de infraestructura de vehículos eléctricos nacionales (NEVI) busca mejorar la infraestructura de carga, pero ha encontrado retrasos, con solo 69 puntos de carga financiados por NEVI instalados para el tercer trimestre de 2024. Problemas como retrasos en permisos y problemas de mantenimiento obstaculizan el progreso.
Para cerrar la brecha de infraestructura, es vital ampliar la accesibilidad y confiabilidad de la carga pública. La colaboración entre los gobiernos federal, estatal y local, así como la inversión privada, es necesaria para mejorar la red de carga y apoyar la transición hacia la movilidad eléctrica.