A medida que las amenazas cibernéticas evolucionan, las organizaciones deben priorizar la seguridad de la identidad y la resiliencia. Un informe reciente de CyberArk revela que el 95% de las organizaciones de Asia-Pacífico y Japón experimentaron múltiples violaciones relacionadas con la identidad en el último año.
De cara al futuro, se prevé que los agentes de IA proliferarán y madurarán para 2025, realizando tareas específicas con alta competencia. Esto incluye la aparición de corredores de IA que integrarán varios agentes de IA para proporcionar soluciones completas.
Con los próximos lanzamientos de la 2ª Ola de Microsoft y la IA de Apple, las capacidades de IA se convertirán en un estándar en los dispositivos cotidianos, mejorando la productividad del usuario a través de análisis en tiempo real y automatización de tareas.
No obstante, los sistemas de IA son cada vez más objetivos para los atacantes cibernéticos debido a las medidas de seguridad inadecuadas. Las organizaciones deben integrar marcos de seguridad directamente en los modelos de IA para combatir riesgos como la contaminación de datos y ataques de ingeniería social sofisticados.
El aumento de las tecnologías nativas de la nube significa que la gestión de identidades de máquinas se ha vuelto más compleja. A medida que las identidades de máquinas superan en número a las identidades humanas, los atacantes se centran en estas para obtener control a nivel de administrador.
A medida que avanza la computación cuántica, las empresas deberán prepararse para posibles violaciones de los métodos de cifrado actuales. En 2025, las organizaciones comenzarán a hacer la transición a sistemas resistentes a la cuántica y a mejorar la gestión de identidades de máquinas para mantenerse seguras.
Estas predicciones destacan la urgente necesidad de que las empresas mejoren la seguridad de la identidad y se preparen para los desafíos futuros en el panorama de la ciberseguridad.