El Príncipe Harry está impugnando la decisión del gobierno del Reino Unido de retirarle su equipo de seguridad británico, argumentando que ha sido tratado injustamente. Su abogada, Shaheed Fatima, dijo a los jueces de la corte de apelaciones que la decisión de proporcionar seguridad 'a medida', en lugar de protección gubernamental completa, era 'injustificada e inferior'.
Harry perdió su protección financiada por el gobierno en febrero de 2020 después de renunciar como miembro activo de la realeza y mudarse a los Estados Unidos. Un juez del Tribunal Superior dictaminó previamente que la decisión del panel gubernamental era legal.
El equipo legal de Harry argumenta que el panel no siguió su propio proceso y no realizó una evaluación de riesgos adecuada. El abogado del gobierno respondió que el argumento de Harry se basaba en una interpretación errónea de la revisión de seguridad.
Se espera que la audiencia concluya el miércoles, con una decisión escrita posterior. La comparecencia de Harry en el tribunal subraya la importancia del caso para él. Ha citado amenazas a la seguridad, incluida una amenaza de Al-Qaida y una peligrosa persecución de paparazzi en Nueva York, como razones para necesitar protección. Anteriormente perdió un caso en el que buscaba pagar de forma privada por la protección policial.
Harry tiene un historial mixto en sus batallas legales con el gobierno y la prensa sensacionalista, obteniendo una victoria significativa en un caso de piratería telefónica contra el Daily Mirror en 2023.