El extenso cultivo de fresas en China, que abarca 202.343 hectáreas, exhibe tecnología agrícola avanzada. Las inversiones públicas y la innovación posicionan a China como el líder mundial en la producción de fresas. Esta escala refleja una planificación meticulosa e inversión estatal.
La IA y los drones mejoran el rendimiento y la calidad de las fresas en China. Los sensores de temperatura y las cámaras espectrales monitorean cada planta. Los drones proporcionan un manejo específico de enfermedades, reduciendo el uso de productos químicos.
China es ahora el punto focal de la innovación en fresas, desplazando a los Países Bajos y los Estados Unidos. Los principales avances incluyen nuevas cepas y automatización. Esta transición subraya la destreza de China en la investigación agrícola.
La industria de la fresa de China refleja un enfoque en la soberanía alimentaria. El dominio de la cadena de suministro de fresas afirma el poder agrícola. Las innovaciones pueden extenderse globalmente, influyendo en las estrategias de otras naciones.