El sistema de metro de Estocolmo, conocido como Tunnelbana, sigue siendo celebrado como la galería de arte más larga del mundo, con más de 90 estaciones que exhiben diversas obras de arte. Esta iniciativa ha transformado el subterráneo en un vibrante centro cultural, fusionando el arte con el transporte diario.
La integración del arte en el metro comenzó en 1957, con más de 150 artistas contribuyendo a lo largo de las décadas. En 2024, el arte en el sistema de metro celebró su 60 aniversario, marcado por eventos y exposiciones especiales.
Entre las estaciones más notables se encuentran Östermalmstorg, con grabados de Siri Derkert, y Solna Centrum, con un diseño similar a una cueva realizado por Anders Åberg y Karl-Olov Björk. La estación Kungsträdgården, diseñada por Ulrik Samuelson, incorpora motivos históricos. Las visitas guiadas de arte y la aplicación SL ArtGuide facilitan el acceso a los visitantes.
El metro de Estocolmo ejemplifica la fusión de funcionalidad y arte, transformando los trayectos diarios en experiencias culturales. El Tunnelbana ofrece una oportunidad única para explorar la galería de arte más larga del mundo, demostrando el valor de la cultura en el espacio público y la mejora de la calidad de vida en la ciudad.