El 29 de abril de 2025, el sol emitió una llamarada solar moderada de clase M1.7, marcando un aumento significativo en la actividad solar. La llamarada se originó en la región 4079 y alcanzó su punto máximo a las 05:13 UTC.
Además de la llamarada M1.7, también se registraron varias llamaradas de clase C. El Laboratorio de Astronomía Solar de IKI e ISZF informó sobre esta actividad intensificada.
Clasificación de las llamaradas solares
Las llamaradas solares se clasifican por intensidad, desde A hasta X, y cada clase representa un aumento de diez veces en la potencia. Estas erupciones pueden incluir llamaradas de protones y eyecciones de masa coronal (CME), que expulsan partículas cargadas y plasma al espacio.
Las llamaradas intensas pueden desencadenar tormentas geomagnéticas e interrumpir las comunicaciones por radio en la Tierra. Los pronosticadores están monitoreando de cerca las regiones activas en busca de posibles erupciones adicionales y su posible impacto en nuestro planeta.