"Nada es tan poco común como un diente de león común", señalaron los botánicos holandeses Karst Meijer y Erik van den Ham, destacando la diversidad a menudo pasada por alto de la planta. Los dientes de león, a menudo vistos como malezas, ahora son reconocidos por su papel crucial en los ecosistemas urbanos.
La investigación revela que los dientes de león urbanos han evolucionado para prosperar en entornos urbanos hostiles. Exhiben un crecimiento superior y una eficiencia fotosintética a temperaturas más altas en comparación con sus contrapartes rurales. Esta adaptación les permite florecer a pesar del efecto isla de calor urbano.
Los dientes de león urbanos también se han adaptado a inviernos más suaves y altas concentraciones de sal provenientes de tratamientos de carreteras. Pueden almacenar sales tóxicas en sus hojas sin daño. Su crecimiento a ras del suelo los protege del pisoteo y las cortadoras de césped.
Los dientes de león sirven como recursos vitales para los polinizadores urbanos, proporcionando hasta el 90% del néctar y el 80% del polen en sus dietas. Más de 200 especies de insectos se benefician de los dientes de león. Esto apoya el establecimiento de otras especies de plantas, creando un ecosistema urbano más diverso y resistente.
La próxima vez que vea un diente de león, considere su papel en el apoyo a la biodiversidad urbana. Estas plantas resistentes no solo sobreviven, sino que también permiten que otras especies prosperen. Incluso puedes agregar hojas de diente de león a tu ensalada para darle un sabor picante.