Físicos británicos han creado con éxito el primer modelo experimental de detonación cuántica, lo que podría revolucionar la producción de energía. Este avance, logrado en 1971 pero comprendido solo recientemente, implica el aprovechamiento de la energía de un vórtice cuántico en rotación. La investigación, dirigida por Hendrik Ulbricht en la Universidad de Southampton, podría allanar el camino para fuentes de energía más limpias y eficientes.
El experimento del equipo consistió en diseñar su propia versión de un campo cuántico utilizando un cilindro de aluminio giratorio y simpolos magnéticos. Esta configuración les permitió replicar las condiciones necesarias para la detonación cuántica. La detonación cuántica implica la extracción y amplificación de energía de un vórtice cuántico en rotación.
Este descubrimiento podría conducir al desarrollo de baterías cuánticas en miniatura. Estas baterías aprovecharían la energía del vacío, ofreciendo una fuente de energía sostenible y potente. Victor Cardoso, físico de la Universidad de Lisboa, enfatiza la necesidad de refinar el modelo para aplicaciones prácticas en tecnologías cuánticas.