El biofilm amenaza la integridad del hormigón en túneles submarinos: Revelada una rápida degradación

Un estudio reciente de la Universidad Tecnológica de Chalmers en Suecia revela un fenómeno preocupante: la formación de biofilm en túneles de carretera submarinos está degradando rápidamente el hormigón. La investigación, centrada en el túnel de Oslofjord en Noruega desde 2014, indica que las bacterias transportadas por el agua de mar penetrante están consumiendo el hormigón a una velocidad de hasta un centímetro por año. Este proceso de biocorrosión, impulsado por bacterias que metabolizan hierro, manganeso, azufre y nitrógeno, debilita la estructura del hormigón, lo que podría provocar costosas reparaciones y riesgos para la seguridad. El profesor asociado Frank Persson señala: "Donde hay intrusión de agua salada, se formará un biofilm y el hormigón cubierto por el biofilm se disolverá gradualmente". El estudio destaca que, si bien el hormigón nuevo tiene un pH alto, la degradación química natural lo reduce con el tiempo, creando un entorno más hospitalario para las bacterias. Esta interacción acelera la corrosión del refuerzo del hormigón y del propio hormigón. La profesora Britt-Marie Wilén enfatiza la necesidad de un monitoreo continuo, afirmando: "Este tipo de biofilm es una señal de advertencia bastante clara. Debe controlar el flujo de agua y la propagación del biofilm y localizar el hormigón suelto y dañado para rociarlo nuevamente, si es necesario". Los investigadores recomiendan mediciones regulares del pH del hormigón, el examen del flujo de agua subterránea y el monitoreo de la propagación del biofilm. Los hallazgos también sugieren que el cambio climático, con temperaturas oceánicas más cálidas y valores de pH más bajos, podría exacerbar la tasa de corrosión. El estudio también condujo al descubrimiento de una nueva familia de bacterias anammox, Anammoxibacteraceae, que proporciona nuevos conocimientos sobre el metabolismo del nitrógeno.