El 5 de diciembre de 2024, Anchorage, Alaska, experimentó una lluvia helada significativa, lo que resultó en condiciones peligrosas en las carreteras y el cierre de escuelas. El Distrito Escolar de Anchorage anunció un cambio a la enseñanza remota debido a la deterioración de las condiciones, siendo la única Girdwood K-8 la que realizó clases presenciales sin servicio de autobús.
El servicio de transporte público de la ciudad, People Mover, suspendió sus operaciones en respuesta al clima peligroso. Una advertencia de clima invernal del Servicio Meteorológico Nacional está vigente hasta las 3 p.m. del jueves, advirtiendo sobre la formación de una ligera capa de hielo en las carreteras.
Los meteorólogos indicaron que la lluvia helada más intensa ocurriría durante la mañana, con temperaturas que se espera que superen el punto de congelación más tarde en el día, convirtiendo las precipitaciones en lluvia. Las áreas con cubierta de nieve residual se prevé que enfrenten el mayor impacto de la lluvia helada.
Además, partes de la península de Kenai están bajo una declaración meteorológica especial debido a condiciones similares de lluvia helada que afectan las principales carreteras.