Un avistamiento raro e inesperado ha cautivado a los científicos frente a la costa de Tenerife, España: un pez pescador negro vivo (Melanocetus johnsonii) fue observado cerca de la superficie, un fenómeno nunca antes registrado en la región. Esta especie de aguas profundas, que normalmente se encuentra entre los 200 y los 2.000 metros de profundidad, fue avistada a solo dos kilómetros de la playa de San Juan el 26 de enero de 2025.
La bióloga marina Laia Valor de la ONG Condrik-Tenerife, que participaba en una expedición de investigación sobre tiburones, notó un objeto negro flotando en el agua. Al examinarlo más de cerca, se dio cuenta de que no era plástico, sino un pez pescador negro, una visión totalmente inesperada tan cerca de la superficie. Este fue el primer registro documentado de un pez pescador vivo en aguas tan poco profundas frente a Tenerife.
El equipo de investigación observó al animal durante varias horas, capturando imágenes y videos de su comportamiento. Lamentablemente, el pez estaba herido y no sobrevivió mucho tiempo después de ser encontrado. Sin embargo, los datos recopilados podrían proporcionar información valiosa sobre la biología de esta especie y los factores que pueden haberlo llevado a emerger a aguas tan poco profundas.
Los peces pescadores negros son criaturas que habitan el fondo del mar y utilizan la bioluminiscencia para atraer presas. Su aspecto inusual, caracterizado por una boca grande y dientes afilados, a menudo evoca la representación icónica en la película Buscando a Nemo. Los avistamientos de esta especie son extremadamente raros, y su presencia tan cerca de la superficie es aún más improbable.
Los científicos sugieren varias explicaciones para este comportamiento anómalo. Entre las hipótesis planteadas se encuentran la posibilidad de enfermedad, fuertes corrientes oceánicas o incluso la huida de un depredador. Cualquiera que sea la causa, el evento representa una oportunidad única para estudiar esta especie en un contexto diferente al habitual.