El Ecopuente de Vidauban, una estructura de 15 metros de ancho, conecta el Macizo de los Maures con la llanura de Argens, permitiendo a la fauna local cruzar la autopista A8 de forma segura.
Construido en 2013, este ecopuente fue diseñado para preservar la biodiversidad al proporcionar un paso seguro para animales como ciervos, jabalíes, reptiles e insectos. Se instalaron barreras de protección para reducir el ruido de la autopista y el deslumbramiento de los faros, creando un entorno adecuado para el movimiento de los animales, especialmente por la noche.
La flora del ecopuente se eligió para que coincidiera con la vegetación circundante, facilitando el movimiento de los animales y promoviendo la mezcla genética. En 2021, se registraron aproximadamente 1.300 cruces de animales en el ecopuente, lo que demuestra su eficacia. Especies como el ciervo rojo, el lagarto ocelado y el águila real utilizan regularmente esta estructura para cruzar la autopista.
Este remanso de paz está dedicado exclusivamente a la vida silvestre. Se pide a los paseantes que no lo utilicen y que lo observen a distancia, respetando su objetivo principal: proteger las especies.