En una expedición revolucionaria en la región de Alto Mayo, al norte de Perú, científicos de Conservación Internacional han descubierto una asombrosa variedad de nuevas especies, revelando la rica biodiversidad del área y subrayando la urgente necesidad de esfuerzos de conservación.
Durante un proyecto de investigación de 45 días en el verano de 2022, el equipo identificó cuatro nuevas especies de mamíferos, diez peces, tres anfibios y diez mariposas. Entre ellos, se destacó una peculiar especie de pez gato, denominada Chaetostoma sp., por su inusual cabeza en forma de globo, una característica nunca antes vista en la ciencia.
Alarmantemente, de las 2046 especies catalogadas, 49 están amenazadas de extinción según la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN). Esto incluye especies en peligro crítico como la rana arlequín (Atelopus seminiferus) y el mono choro de cola amarilla (Lagothrix flavicauda).
La expedición también documentó 950 especies de plantas, de las cuales cinco son endémicas de la región de San Martín, y tres potencialmente nuevas para la ciencia. Los hallazgos son críticos, ya que destacan la importancia ecológica del Alto Mayo, que abarca más de 780,700 hectáreas y alberga tanto biodiversidad rica como comunidades indígenas.
Utilizando técnicas innovadoras de ADN ambiental (eDNA), los investigadores analizaron muestras de agua de la cuenca del Alto Mayo, detectando material genético de 261 especies de vertebrados. Este método se aplica por primera vez en Perú, mostrando su potencial para las evaluaciones de biodiversidad.
A pesar de las presiones de la deforestación y la expansión agrícola, el Alto Mayo ha mantenido su integridad ecológica en gran parte gracias a los esfuerzos de conservación cultural de la comunidad indígena Awajún, quienes han colaborado con científicos en esta investigación. Su líder, Yulisa Tuwi, enfatizó la importancia de preservar el bosque para su sustento y su identidad cultural.
Conservación Internacional busca aprovechar estos hallazgos para priorizar áreas de protección en colaboración con gobiernos locales y comunidades indígenas, asegurando así la preservación de este ecosistema vital.
A medida que el mundo enfrenta desafíos ambientales crecientes, los descubrimientos en el Alto Mayo sirven como un recordatorio urgente de la necesidad de proteger la biodiversidad de nuestro planeta.