Arqueólogos han descubierto el templo de Palaspata en las tierras altas de Bolivia. Este complejo ceremonial ofrece nuevas perspectivas sobre la organización y alcance de la civilización Tiwanaku. El templo está ubicado aproximadamente a 215 kilómetros al sureste del sitio principal de Tiwanaku.
La civilización Tiwanaku floreció cerca del lago Titicaca desde alrededor del 500 hasta el 1000 d.C. Eran conocidos por su arquitectura de piedra y monolitos, y su influencia se extendió por Bolivia, Perú, Chile y Argentina. El descubrimiento de Palaspata sugiere un estado más centralizado.
El complejo del templo de Palaspata mide aproximadamente 125 por 145 metros y presenta 15 recintos cuadrangulares que rodean un patio central hundido. Su diseño es similar a otros templos Tiwanaku, como Kalasasaya. La alineación del templo con el equinoccio solar sugiere que allí se realizaban rituales astronómicos.
Los artefactos encontrados en el sitio incluyen fragmentos de vasos keru, que se utilizaban para beber chicha, una cerveza tradicional de maíz. El hecho de que el maíz no crezca a la altitud del sitio indica un comercio a larga distancia. Otros artefactos incluyen hojas de obsidiana, fragmentos de turquesa, conchas marinas y cerámica exótica.
El descubrimiento de Palaspata proporciona evidencia de la influencia de Tiwanaku más allá de su territorio central, destacando el papel de la religión en las transacciones económicas y políticas. Es probable que la mayoría de las interacciones se facilitaran a través de rituales y creencias compartidas.
Las autoridades locales están trabajando para proteger el sitio del saqueo, el desarrollo y la erosión, con el objetivo de promover el turismo y exhibir la historia de la región. Justo Ventura Guarayo, el alcalde de Caracollo, está involucrado en los esfuerzos de preservación.
Investigaciones futuras podrían revelar más sobre la frontera oriental de Tiwanaku y contribuir a una comprensión más amplia de cómo las sociedades antiguas en los Andes construyeron redes de poder a través de templos, comercio y rituales compartidos. Este hallazgo resuena con la importancia de sitios arqueológicos como Machu Picchu y la riqueza cultural de la región andina, atrayendo el interés de turistas y académicos por igual.