Los futuros de las acciones estadounidenses indican una posible desaceleración a partir de mayo de 2025, impulsada por la aprensión de los inversores con respecto a los niveles de deuda de EE. UU. y la amenaza inminente de una escalada de las guerras comerciales. Los futuros del Promedio Industrial Dow Jones han disminuido en 250 puntos, una caída del 0,58%. Del mismo modo, los futuros del S&P 500 han caído un 0,6% y los futuros del Nasdaq han caído un 0,61%.
El rendimiento del bono del Tesoro a 10 años ha aumentado en 4,6 puntos básicos, alcanzando el 4,485%, luego de la rebaja de la calificación crediticia de EE. UU. de AAA a Aa1 por parte de Moody's el 16 de mayo de 2025. Esta rebaja refleja preocupaciones sobre el aumento de la deuda pública y las obligaciones de pago de intereses. Moody's espera que los déficits federales se amplíen, alcanzando casi el 9% del PIB para 2035, impulsados principalmente por el aumento de los pagos de intereses sobre la deuda, el aumento del gasto en derechos y la generación de ingresos relativamente baja.
El dólar se ha debilitado frente al euro y al yen, mientras que el oro ha subido un 1,86% a 3.246,40 dólares la onza. El Secretario del Tesoro, Scott, ha advertido sobre el posible restablecimiento de aranceles para los países que no negocian de buena fe, lo que contribuye a la inquietud del mercado. Esta situación se ve agravada aún más por las preocupaciones de una escalada de la guerra comercial con China, ya que entran en vigor nuevos aranceles estadounidenses sobre Canadá, México y China, lo que genera temores de tensiones comerciales prolongadas. El comportamiento reciente del mercado refleja una preocupación más amplia de que la economía estadounidense podría estar al borde de una recesión.