En una medida sorprendente, el Banco Central de Turquía (CBT) aumentó su tipo de interés de referencia en 350 puntos básicos hasta el 46% el jueves 17 de abril de 2025. Esta decisión marca un fuerte contraste con los tres recortes de tipos consecutivos implementados desde diciembre de 2024.
El Comité de Política Monetaria, dirigido por el gobernador Yasar Fatih Karahan, también elevó la tasa de préstamos a un día al 49% y la tasa de endeudamiento a un día al 44,5%. El banco declaró que este endurecimiento de la política monetaria tiene como objetivo fortalecer la desinflación moderando la demanda interna, apoyando la apreciación real de la lira turca y mejorando las expectativas de inflación.
La decisión se produce en medio de crecientes preocupaciones económicas y agitación política, incluido el reciente arresto del alcalde de Estambul, Ekrem Imamoglu. Algunos analistas creen que la subida de tipos también estuvo influenciada por las continuas pérdidas de reservas desde finales de marzo. El banco central ha declarado que la postura monetaria restrictiva se mantendrá hasta que se logre la estabilidad de precios a través de una disminución sostenida de la inflación.