El 29 de diciembre de 2024, en San Francisco, Stephen Akridge, cofundador de Solana, enfrenta una demanda presentada por su exesposa, Elisa Rossi, quien alega que manipuló y tomó millones de sus recompensas de staking. La demanda sostiene que Akridge utilizó su experiencia en blockchain para operar las cuentas de staking de Rossi sin autorización, lo que resultó en pérdidas financieras significativas.
La demanda incluye cinco cargos: incumplimiento de contrato, violación del deber fiduciario, enriquecimiento injusto y fraude. La queja de Rossi destaca la negativa de Akridge a devolver los fondos y su actitud despectiva hacia sus consultas.
Esta disputa legal surge mientras el precio de Solana se recupera, cotizando por encima de 170 $ después de una caída significativa durante la controversia de FTX, donde bajó a 10 $. Dadas las condiciones actuales del mercado, las pérdidas alegadas de Rossi podrían ascender a millones.
El caso está pendiente y no ha habido comentarios públicos de Akridge o del equipo de Solana.