Tesla, bajo la dirección de Elon Musk, ha anunciado el lanzamiento de su Proyecto Redwood, con el objetivo de producir un nuevo modelo de crossover compacto a partir de junio de 2025. Esto ocurre mientras la compañía experimenta un aumento significativo en el valor de sus acciones, alcanzando un máximo histórico de 415 $ la semana pasada, superando su anterior pico de 141,50 $ de hace más de tres años.
El aumento en las acciones de Tesla, que ha crecido casi un 65 % desde las elecciones del 5 de noviembre, se atribuye al optimismo de los inversores sobre la relación continua de Musk con el presidente electo de EE. UU., Donald Trump. En un informe reciente, Tesla China reveló que vendió 21,900 vehículos eléctricos en la primera semana de diciembre, marcando las ventas semanales más altas para el cuarto trimestre.
Tras esta noticia, las acciones de Tesla subieron un 3,1 % a 413,26 $. Se especula que el modelo Redwood se alineará con rumores de un Tesla de 25,000 $, aunque el precio final sigue siendo incierto. La nueva plataforma de vehículos eléctricos se espera que reduzca drásticamente los costos de producción, lo que podría convertir al Redwood en el modelo más asequible hasta la fecha, compitiendo directamente con fabricantes de vehículos eléctricos chinos como BYD.
Tesla tiene como objetivo aumentar la producción a 10,000 unidades semanales, lo que se traduce en una producción anual de medio millón de vehículos. Este ambicioso plan sigue a un aumento del 35 % en la producción el año pasado, alcanzando 1,85 millones de vehículos. El CEO Musk indicó que los próximos productos podrían permitir ventas anuales de 5 millones de vehículos.
El Redwood se fabricará en la planta de Tesla en Texas antes de que la producción se expanda a nivel mundial. Esta iniciativa posiciona a Tesla para desafiar las estrategias de hidrógeno de sus competidores y establece una visión clara para el futuro de los vehículos eléctricos.