Warren Buffett, CEO de Berkshire Hathaway, está reevaluando su estrategia de inversiones, lo que ha provocado discusiones entre los inversores sobre sus recientes ventas de acciones de Apple. La participación de Buffett en Apple alcanzó un 5,9%, valorada en casi 178 mil millones de dólares, pero ha continuado reduciendo esta posición.
El 2 de noviembre, Buffett reveló que continuó disminuyendo su participación en el fabricante de iPhone y en otras acciones durante el tercer trimestre, resultando en una ganancia de 97 mil millones de dólares para Berkshire Hathaway. Este movimiento elevó los niveles de efectivo de la empresa a cifras sin precedentes, totalizando 325 mil millones de dólares, lo que representa el 28% del valor total de los activos de Berkshire, el porcentaje más alto desde al menos 1990.
Esta decisión ha provocado una serie de especulaciones entre analistas. Algunos creen que Buffett se mantiene fiel a los principios que aprendió bajo la tutela del icónico inversor Benjamin Graham, señalando el alto índice precio-beneficio de Apple en relación con su potencial de crecimiento. Recientemente, Apple advirtió a los inversores que sus futuros productos podrían no ser tan rentables como el iPhone, a medida que la empresa invierte en inteligencia artificial para competir con rivales como Google.
Por otro lado, hay quienes sugieren que hay algo más en juego. La larga admiración de Buffett por Apple y la escasez de otras oportunidades de inversión pueden indicar que está preparando el terreno para su sucesor o que anticipa una crisis, lo que justificaría la acumulación de efectivo. 'Es un fenómeno extraño de observar y plantea la pregunta: ¿por qué se está acumulando tanto efectivo?', dijo Greggory Warren, analista de Morningstar.
Warren expresó escepticismo sobre la posibilidad de que Buffett se esté preparando para una gran adquisición, una estrategia que se ha convertido en emblemática de su estilo de inversión. También destacó que Berkshire no está proporcionando capital a grandes empresas de EE.UU., como Intel, que buscan miles de millones de dólares para financiar sus operaciones.
Además de sus ventas de acciones, Buffett limitó sus compras de acciones este año, adquiriendo solo 5,8 mil millones de dólares en acciones hasta finales de septiembre, un valor que contrasta fuertemente con los 133,2 mil millones de dólares en ventas realizadas por Berkshire. Esta estrategia puede reducir el riesgo accionario de Berkshire y proporcionar suficiente liquidez para inversiones futuras, una táctica que ya se ha utilizado en momentos de estrés en el mercado.
La Berkshire Hathaway siempre ha mantenido una posición de efectivo robusta, en parte para cumplir con los requisitos regulatorios que garantizan suficiente liquidez en su cartera de inversiones para cubrir futuras reclamaciones de su vasta operación de seguros. La inversión en Apple se remonta a 2016, cuando la empresa adquirió alrededor de 10 millones de acciones por 1,1 mil millones de dólares, una decisión sorprendente, dado que Berkshire había evitado tradicionalmente empresas de tecnología de rápido crecimiento.
Los inversores tendrán que esperar tres meses más para entender mejor las intenciones de Buffett. Berkshire Hathaway informó que Buffett compartirá sus reflexiones sobre la situación en su carta anual, prevista para febrero. Mientras tanto, el mercado observa atentamente los movimientos del 'Oráculo de Omaha', en la expectativa de que sus próximos pasos puedan revelar más sobre su visión para el futuro de la empresa.