Un estudio de 2025, realizado en la Universidad de California, Berkeley, demostró que las interacciones virtuales cortas con perros de terapia pueden reducir eficazmente el estrés. La investigación involucró a más de 1.000 participantes.
Las sesiones virtuales imitaban las interacciones reales con perros de terapia. Los videos incluían un mensaje de bienvenida, narración y estímulos sensoriales. Esto animaba a los espectadores a imaginar que acariciaban al perro y a reflexionar sobre sus emociones.
El estudio encontró que las sesiones virtuales eran particularmente beneficiosas para estudiantes y adultos ocupados. Las mujeres experimentaron más alivio del estrés que los hombres después de ver los videos. La edad no influyó significativamente en los resultados.
Estos videos pueden ser un primer paso accesible hacia la atención de la salud mental. También protegen el bienestar de los perros de terapia. Este método es inclusivo y puede llegar a personas de diferentes orígenes.
Las limitaciones del estudio incluyen la falta de un grupo de control y un desequilibrio de género. La investigación futura tiene como objetivo rastrear los efectos a largo plazo. La combinación de estos módulos con técnicas de mindfulness podría mejorar aún más su impacto calmante.
El estudio, publicado en la revista *PLOS ONE*, destaca el potencial de la terapia canina virtual como una herramienta fácilmente disponible para el bienestar mental. Los investigadores encontraron que los participantes informaron sentirse significativamente menos ansiosos y solitarios después de ver los videos. El estudio también señaló que el formato virtual podría ser particularmente útil para las personas que no tienen acceso a la terapia tradicional o que se sienten incómodas con las interacciones en persona. Las sesiones virtuales proporcionaron una sensación de conexión y consuelo, reflejando los efectos positivos de las interacciones de la vida real con perros de terapia. Los hallazgos del estudio sugieren que la terapia canina virtual podría ser una valiosa adición a los recursos de salud mental, ofreciendo una forma simple pero efectiva de promover la relajación y reducir los sentimientos de aislamiento.