En Turquía, perros especialmente entrenados están desempeñando un papel crucial en la lucha contra la escasez de agua al detectar fugas de agua subterráneas utilizando su agudo sentido del olfato. Este enfoque innovador se produce cuando Turquía enfrenta desafíos crecientes relacionados con los recursos hídricos.
En una academia de entrenamiento canino en Ankara, los expertos están entrenando perros para diversas tareas especializadas, incluyendo búsqueda y rescate, detección de narcóticos y detección de explosivos. Entre estos talentosos caninos, un Labrador Retriever llamado Maylo y un Golden Retriever llamado Ayaz han sido seleccionados para una nueva misión: identificar fugas de agua subterráneas.
Maylo y Ayaz fueron introducidos al olor del cloro al principio de su entrenamiento. El cloro es un químico que se encuentra comúnmente en los suministros de agua tratada. Al detectar este olor, los perros pueden localizar fugas en la red de agua que de otro modo podrían pasar desapercibidas. El experto en entrenamiento canino, Hasan Saratlı, explicó que el objetivo a largo plazo es que los perros alcancen niveles subterráneos más profundos, aproximadamente de 1,5 a 2 metros de profundidad, para localizar fugas en las tuberías de agua que se originan en los embalses.